Annie, la muñeca que camina sola

 

Por Carlos García Torín


Feliz cumpleaños dulzura…

Jenni recibió su regalo con alegría. Al poco rato de jugar con la muñeca sintió un ahogo. Primero confusión, luego temblor y rabia. Cuando las enfermeras entraron notaron que se contenía. De pronto soltó una carcajada estridente y desquiciada.

Nunca habían visto una parapléjica reírse así.



Fotografía original de: Irum Shahid

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